A pesar de su alta prevalencia, la desnutrición está infradiagnosticada en geriatría. Por este motivo, el objetivo del presente documento de consenso es elaborar un protocolo de valoración nutricional geriátrica. En el marco de la SEGG se ha creado un equipo multidisciplinar con el objetivo de darle la debida importancia a la desnutrición y el riesgo de la misma para que sean diagnosticadas y tratadas de forma adecuada.
Entre los muchos métodos validados para el cribado nutricional, el MNA-SF representa una herramienta práctica. Tras evidenciar la sospecha o la presencia de desnutrición la valoración completa prevé la realización de una historia nutricional exhaustiva. Las historias clínico-nutricional y dietética pretenden evidenciar los posibles factores de riesgo sobre la base del cuadro de desnutrición. Entonces la valoración antropométrica, asociada a los datos de laboratorio, pretende objetivar las modificaciones físicas y metabólicas asociadas a la desnutrición. Hoy en día cada vez más se tiende a profundizar en la valoración nutricional utilizando técnicas no invasivas de estudio de la composición corporal asociadas al estudio funcional. Esta última representa un índice indirecto del estado nutricional de gran interés para la geriatría. En conclusión, un correcto cribado nutricional es la base fundamental para un temprano diagnóstico de desnutrición y poder valorar la indicación al tratamiento nutricional. Para esto es fundamental fomentar la investigación en el campo de la nutrición geriátrica para aumentar el conocimiento y poder hacer cada vez más una geriatría basada en la evidencia.