Sesenta pacientes con diagnóstico de carcinoma infiltrante de mama, estadios T1-T3, que recibieron tratamiento con quimioterapia neoadyuvante fueron sometidas posteriormente a cirugía mamaria y biopsia del ganglio centinela mediante administración intratumoral del radiofármaco.
Se consiguió la detección gammagráfica de algún ganglio centinela en 55/60 pacientes (91,6%). Cuando se excluyeron los casos con reinyección periareolar del radiofármaco por falta de migración, la detección fue del 70% (42/60). Cuando se comparó la detección o no del ganglio centinela en estas 42 pacientes, no se encontraron diferencias en función de la edad, lateralidad-localización de la lesión, tamaño pre y posquimioterapia, grado histológico del tumor o perfil inmunohistoquímico. Sí existieron diferencias significativas al comparar los grupos según el grado de respuesta patológica del tumor, valorado tanto con el sistema de Miller-Payne (no detección 44,4%-detección 16,7%, p = 0,003) como con el sistema residual cancer burden (72,2%-28,6%, p < 0,01).
La detección gammagráfica del ganglio centinela tras administración intratumoral del radiofármaco en pacientes con cáncer de mama que recibieron quimioterapia neoadyuvante estuvo por debajo del valor óptimo, siendo necesaria en ocasiones la reinyección periareolar, lo que podría estar en relación con una alteración de las vías de drenaje linfático. Existió una significativa relación inversa entre detección del ganglio centinela y el grado de respuesta patológica tumoral.