Se incluyó a 49 pacientes con EM. Se les realizó determinación de 25-OH-vitamina D, PEV, exploración neurológica para determinar la discapacidad y se recogieron variables clínicas tales como el antecedente de neuritis óptica.
El valor medio de 25-OH-vitamina D de los pacientes fue de 28,1 ± 9,5 ng/ml, la latencia de los PEV fue de 119,1 ± 23,2 ms y la amplitud de 8,5 ± 4,4 μV. Los pacientes con niveles normales de 25-OH-vitamina D tuvieron mayor número de brotes en el año previo al estudio (p = 0,049) y aquellos con déficit de vitamina D y neuritis óptica previa no presentaron reducción de la amplitud de los PEV (p = 0,006).
Los pacientes con déficit de vitamina D tienen menor actividad clínica de la EM y no presentan afectación axonal en PEV tras haber sufrido neuritis óptica. Estas asociaciones, aunque estadísticamente significativas, no parecen clínicamente plausibles, por lo que sería preciso realizar nuevos estudios que intentasen confirmar esta posible asociación.