Se realiza un estudio retrospectivo de 300 niños que precisaron una canalización arterial y/o un cateterismo cardíaco durante la infancia en relación con la existencia de patología cardiovascular congénita. Durante su seguimiento en la consulta de cardiología pediátrica, a 7 de ellos se les detectó una discrepancia de longitud de los miembros inferiores (MM II) por lo que fueron remitidos a nuestras consultas externas para estudio.
Los 7 pacientes fueron valorados en nuestra consulta con una media de 10 años de edad. La media de discrepancia de longitud fue de 2,7 cm, más frecuente en el lado derecho a expensas de fémur y tibia. Tres de los pacientes presentaron una deformidad de la extremidad proximal del fémur: 2 casos de caput valgum y uno de apofisiodesis aislada bilateral de trocánter mayor. Todos los niños fueron tratados inicialmente con un alza en el miembro más corto. Uno de ellos precisó un alargamiento tibial y 2 de ellos están a la espera de alargamiento para la compensación de la discrepancia.
Es recomendable el seguimiento clínico y radiológico de los pacientes a los que se les haya realizado un cateterismo en su primera infancia por la relación que existe entre estas técnicas y el riesgo de desarrollar una discrepancia de longitud en el miembro inferior.