Se revisaron retrospectivamente los registros prospectivos de 41 pacientes (40 varones) con aneurismas tor¨¢cicos que compromet¨ªan ramas supraa¨®rticas o viscerales sometidos a procedimientos h¨ªbridos, en el periodo 1998-2007. Todos los pacientes fueron clasificados como ASA IV. ¨¦stos fueron divididos en dos grupos: grupo A, 32 pacientes con aneurismas que involucraban el arco a¨®rtico y sus ramas (2 sustituciones de aorta ascendente, 1 reparaci¨®n de arco, 13 derivaciones car¨®tido-carot¨ªdeas, 12 derivaciones car¨®tido-subclavias y 4 transposiciones totales de troncos supraa¨®rticos); grupo B, 9 pacientes con aneurismas toracoabdominales (4 transposiciones parciales y 5 totales de troncos viscerales). En el grupo A la media de edad fue 69,3 ¡À 1,3 (intervalo, 62-73) a?os, y en el grupo B fue 71,5 ¡À 5,0 (intervalo, 68-74) a?os.
La media de estancia hospitalaria fue 18 ¡À 7,1 d¨ªas (intervalo, 5-35) y 12 ¡À 8,2 d¨ªas (intervalo, 2-15) para los grupos A y B, respectivamente. La mortalidad global fue del 12,2 % (el 3,4 y el 44,4 % para los grupos A y B, respectivamente), con morbilidad neurol¨®gica del 3,4 y el 11,1 % , respectivamente.
Los resultados de nuestros tratamientos h¨ªbridos en la zona del arco a¨®rtico son comparables con los de la cirug¨ªa convencional. Las reparaciones toracoabdominales con revascularizaci¨®n completa de las ramas viscerales se asocian a mortalidad elevada. As¨ª, la cirug¨ªa h¨ªbrida es una alternativa v¨¢lida para pacientes de alto riesgo que no precisen la revascularizaci¨®n completa del ¨¢rea visceral.