En las neutrofilias con formas anómalas podemos encontrar mielemia o desviación izquierda (infecciones o leucemia mieloide crónica), o bien un síndrome leucoeritroblástico (mielofibrosis o infiltración por tumor sólido).
Si lo que predomina es una linfocitosis con formas atípicas, los grupos diagnósticos más relevantes son los síndromes mononucleósicos y las neoplasias linfoides (B o T), tanto de células precursoras como de linfocitos maduros.
Por el contrario, debemos descartar la presencia de células inmaduras en sangre periférica ante una leucocitosis con monocitosis y citopenias asociadas (leucemia mieloide aguda o leucemia mielomonocítica crónica).