Se efectuó un estudio prospectivo longitudinal. Se registraron niveles de hemoglobina, recuento plaquetario, niveles de fibrinógeno y parámetros tromboelastométricos: tiempo de coagulación (CT), tiempo de formación del coágulo (CFT), firmeza máxima del coágulo (MCF), y ángulo α (EXTEM, INTEM, FIBTEM). Las mencionadas determinaciones se realizaron: antes del inicio de la cirugía; al finalizar la cirugía citorreductora y al concluir la HIPEC. Se utilizaron los test estadísticos apropiados. Los valores de p < 0,05 se consideraron estadísticamente significativos.
Se incluyó en el estudio a 41 mujeres con una mediana de edad de 54 años (rango: 34-76). Tras la cirugía citorreductora se observó una caída de la tasa de hemoglobina desde 11,4 ± 1,5 a 10,6 ± 1,6 g/dl; un descenso del fibrinógeno sérico desde 269 ± 69 hasta 230 ± 48 mg/dl (p < 0,01) y una reducción de MCF en FIBTEM desde 20 ± 10 hasta 16 ± 8 mm (p < 0,01). La HIPEC no se asoció a alteraciones hemostáticas. Se observó una moderada relación negativa entre el número de concentrados de hematíes administrados y los niveles de fibrinógeno (ρ = −0,5; p = 0,002) y los valores de MCF EXTEM (ρ = −0,43; p = 0,006) registrados tras la HIPEC.
Las alteraciones hemostáticas observadas aparecen tras la cirugía citorreductora, probablemente a consecuencia de la hemorragia quirúrgica. Se requieren más estudios para confirmar una correlación entre las necesidades transfusionales y las pruebas de coagulación postoperatorias.